La proclama de Orozco

Se acerca un día de combate en el que haremos ver al mundo entero que los defensores de la legitimidad jamás cederán el triunfo a los usurpadores y si el abandono voluntario que hemos hecho en algunos puntos que no me presentaban las ventajas que debo buscar para pelear contra las fuerzas que tenemos al frente les ha permitido formar la idea de que les tememos; cuando se muevan de las posiciones que ocupan si no retroceden hallaran su escarmiento con la muerte que vuestros brazo no deben escasear, en recompensa de tan vil conducta que observan talando y quemando los campos y hogares que os pertenecen.

La campaña que han abierto con fuerzas tan desiguales como las habéis visto es la más bárbara y atroz.

En Navarra por la parte de la Solana y en Alava por la de Vitoria sobre Guevara y pueblos inmediatos todo lo queman y arrasan, nada se reserva a su rapiña y al rebelde Espartero le miráis sobre Amurrio, Orduña y Arciniega hacer cuanto puede para satisfacer su inhumanidad y torpes sentimientos.

En vano los malvados intrigantes propalan voces de transacción que no puede haber jamás entre dos partidos tan opuestos en principios.

Sea constantemente nuestra divisa el Rey y la ley.

Triunfar o morir con las armas en la mano.

Enviado por Enrique Ibañes